Por: Roxana rodríguez Tamayo
Fotos Monserrat Castañeda
Christian Thiam regresará. Sus expresiones, mientras recorría cada sitio de la EICTV, delatan al artista conmovido con la escuela de Todos los Mundos, donde no es difícil soñar, vivir y pensar desde y para el cine. Así se evidenció en los pocos días en que, el cineasta y profesor de la Universidad Virtual de Senegal, convivió en la comunidad eictviana como uno más.
Doctorante en Ciencias, Tecnologías y Medios Digitales, Thiam tiene a su cargo la unidad educativa digital y la formación en Artes Gráficas y Digitales en ese centro de altos estudios, en Dakar. Figuran en su filmografía los documentales La cara oculta de una cumbre (ANOCI, 2010), Vida en prisión (Samba Kane, 2012), La crisis de Casamance (Casa Di Mansa, 2014), el largometraje de ficción Mami Watta (2021), este último exhibido en la sala Glauber Rocha y que devino colofón de una charla sobre la composición de la imagen, la teoría y la estética del montaje en su obra.
Desde hace dos años abrazaba la idea de venir a Cuba para concretar el viaje de estudios que, como profesor investigador en una universidad pública, financia el Estado y gobierno de su país. Pero, razones de diversa índole, lo alejaron de este proyecto hasta principios del presente año en que, por mediación de un gran amigo suyo, también senegalés, entró en contacto con la sede diplomática cubana en Dakar.
“Cuando me reuní con la embajadora, hablamos de mi intención de venir a Cuba a realizar mi viaje de estudios. Ella pidió, si era posible, conocer nuestra universidad. Así que la invitamos y le encantó lo que vio.
“Tuvo un encuentro con el rector y a partir de entonces, empezaron las conexiones entre la EICTV, el Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) y también, los Estudios de Animación del ICAIC.
“Senegal posee diversas representaciones diplomáticas de países con un alto nivel y recursos para financiar. Ellos se han dado cuenta que los resultados de las investigaciones en nuestras universidades públicas, beneficia a ambas partes, de manera que ofrecen muchas facilidades para que vayamos hacia sus países.
“Yo nací en Senegal, pero crecí en los Estados Unidos; después de varios años, decidí volver a mi país a trabajar. Sin embargo, en realidad, no me interesa mucho lo que quieren mostrarme allí o en otros países del primer mundo, deseo ver otras cosas. Por eso, estoy aquí”.
-¿Y qué le parece la escuela?
“Mi primera impresión, en el plano de la infraestructura, me parece muy valioso lo que ustedes tienen. Las visitas a los locales del Archivo Fílmico, el Almacén Tecnológico, el Estudio de Sonido, son impresionantes.
“En cambio, lo que quizá se pudiera corregir es que cuando busqué información sobre la EICTV, supe que era una institución creada para la producción de cine en América Latina, Asia y África. Y desgraciadamente, los africanos no aparecen representados aquí como otros lugares del mundo. Para mí sería interesante hacer para que África tenga presencia en la EICTV.
-¿Cuáles son sus expectativas con esta visita?
“Tengo dos objetivos; uno es que, además de mí, otros colegas de la universidad de Senegal decidan hacer su viaje de estudios acá; quisiera que existiese más colaboración entre nuestras instituciones, en especial, en el ámbito de la investigación y alcanzar resultados ventajosos para todos.
“La otra razón es justamente la Maestría en Creación y Realización Audiovisual de nuestra universidad que recibirá financiamiento del programa Erasmus, de la Unión Europea, y aportará grandes beneficios para todos. Y me gustaría que Cuba se integrara.
“Estos estudios se diseñaron en dos vertientes de especialización; una, enfocada en la creación y producción audiovisual y la otra, en la investigación, esta última no existe de forma gratuita en África, como se pretende que sea la totalidad de la maestría.
“En el plano pedagógico, tendrá diversas ventajas que permitirán desarrollar programas de estudio en el seno de nuestras universidades, sin utilizar nuestros propios medios financieros, solo a partir del respaldo de Erasmus.
“Tendremos oportunidad de generar intercambios en varios niveles, en particular, en lo investigativo y a la vez, desplegar movilidad entre docentes y estudiantes, porque con el programa los profesores incluidos se desplazarían a los distintos países y cada uno de ellos aportarían sus métodos de enseñanza, su cultura.
“También, como los estudiantes podrían desplazarse a los distintos países, tendrían la posibilidad de realizar un semestre en el lugar de su elección, dentro de las naciones integrantes del consorcio; en este caso, universidades de Burundi, Polonia, Italia; por supuesto, Senegal, y Cuba, con la Universidad de las Artes (ISA) y la EICTV, como centros especializados en el audiovisual.
“En mi opinión, en el plano práctico, la EICTV cuenta con lo necesario para desarrollar un buen máster de cine. He visto en sus aulas que la cantidad de alumnos es pequeña, lo cual representa un plus, una fortaleza. Por eso, en el propio proceso de construcción del programa, iríamos aprendiendo mucho más, unos de otros.
“Los africanos tenemos con Cuba una cierta historia de amor, a nosotros nos gustan las revoluciones. Sí, hay una gran historia de amor, no solo por los grandes personajes como Che Guevara, Fidel Castro, sino también por la cultura cubana; y absolutamente, por la religión que es cultura también. Por todas estas razones elegimos a Cuba. Esta es mi historia con este país”.
-Entonces, la próxima vez seguro no vendrá solo…
Por supuesto…
-¿Y qué te parece Cuba?
“Venir aquí me ha hecho reflexionar mucho sobre las dificultades económicas que viven, no me lo esperaba a este punto, las estoy descubriendo, pero al mismo tiempo, observo resiliencia. Si estas mismas dificultades ocurren Senegal, explotaba el país, nosotros no sabemos ser resilientes.
-Quizás sea por nuestra condición de insularidad
“Estoy convencido de que hay muchas cosas que podemos aprender. Es impresionante cuánto se ha logrado en Cuba en materia de conservación del patrimonio, donde me gustaría profundizar en el futuro. Pudiera haberme ido a aprender a los Estados Unidos, pero no es igual. Allá para preservar su patrimonio destinan millones de dólares, así es muy fácil. En cambio, para nosotros en Senegal, un país que no es rico, observar a Cuba que, sin esos millones, ha conseguido preservarlo, esa es la mejor escuela, la mejor enseñanza”.