El cineasta y periodista argentino Andrés Di Tella, presentó en la sala Glauber Rocha, de la EICTV, su más reciente documental 327 cuadernos (2015), que al decir del autor, es “más una fábula que un documental y que Ricardo Piglia es el símbolo de alguien que está viendo qué sentido puede darle a su pasado. Esos cuadernos son una reencarnación de ese pasado. Todos reprocesamos el pasado y tratamos de armar un relato con los pedazos sueltos porque necesitamos que la vida tenga un sentido a través de esos recuerdos”, explicó Di Tella, quien durante esta semana se encuentra impartiendo el módulo de Ensayo y Autobiografía en la Maestría de Cine-Ensayo.
La obra de marras parte del volumen Los diarios de Emilio Renzi, del importante escritor y crítico literario argentino, obra que a su vez es una reformulación de los recuerdos, experiencias, y anécdotas que a partir de los 16 años de edad se dedicó a registrar en numerosos papeles, libretas y cuadernos.
Desde el comienzo del filme, Piglia aclara que “no hay nada más ridículo que la pretensión de retratar la propia vida”. Comparte con Di Tella sus memorias más íntimas, desde que su padre —preso en 1955 por defender a Perón— decidió escapar con su familia desde Adrogué hasta Mar del Plata; hasta que una enfermedad neurológica lo embarga y le impide escribir. La pieza de Di Tella recoge este diálogo de remembranza y reflexión.
Fotografías, noticieros de la época, y películas domésticas se conjugan en 327 cuadernos, que contó con la fotografía de Gastón Girod y Guillermo Ueno, montaje de Felipe Guerrero y Valeria Racioppi, y producida por Gema Juárez Allen, Alejandra Grinschpun y Jennifer Walton.